miércoles, agosto 11, 2010

Ateismo vs. Comunismo

En sus intentos de satanizar el ateísmo, muchos líderes eclesiásticos actuales insisten en equiparar el ateísmo con el comunismo. Esta táctica, que se originó durante la histeria anticomunista del senador Joseph McCarthy, es tan carente de base en los hechos hoy como lo fue entonces. Del solo hecho de que uno sea ateo no se sigue que uno sea comunista. Mark Twain, Thomas Edison, Luther Burbank, Katherine Hepburn y muchos otros son conocidos ateos, y sin embargo nadie los llamaría comunistas.

De hecho, ha habido muchos países comunistas en Europa y otros lugares que también eran cristianos, incluyendo las católicas romanas Italia, Hungría y Polonia y la Alemania luterana.

La calumniosa campaña contra los ateos es un intento de ligar a éstos con los crímenes de varias dictaduras comunistas. Pocos negarían que la Unión Soviética de José Stalin era una dictadura totalitaria, o que concentró mucha de su hostilidad contra la Iglesia. Sin embargo, debemos considerar dos factores importantes: 1) si cometió sus crímenes en el nombre del ateísmo, y 2) cuáles fueron sus motivaciones.

A lo largo de su historia, el pueblo de Rusia siempre ha tenido fuertes inclinaciones místicas. Sus tradiciones místicas se extienden muy atrás en la historia, hasta los tiempos de los primeros establecimientos eslavos hace más de mil años. En el año 988, debido a la conversión de Vladimir I, Rusia se convirtió oficialmente al cristianismo. El pueblo ruso vivía y respiraba religión, y ésta jugó un papel central en sus vidas hasta el tiempo de la Revolución Bolchevique de 1917.

Stalin (1879-1953) se formó en un seminario, y aprendió bien sus lecciones de manipulación y control mental. Sabía que la mejor forma de sofocar la disidencia y de quebrar la voluntad del pueblo era privarlo de aquello que valoraba más. La religión, por ser tan importante en la vida del pueblo ruso, era el blanco perfecto. Al privar a la gente de la muleta de la religión, él sabía que podía aplastar su espíritu.

No hay elementos de libre pensamiento (el fundamento del ateísmo) en la filosofía soviética. Stalin con toda seguridad no estaba familiarizado con las bases humanistas del ateísmo; su meta era la creación de un estado totalitario en el que él sería el nuevo dios, cuyos dictados no debían cuestionarse. Los derechos individuales, tan esenciales al libre pensamiento, eran desconocidos en la Rusia soviética.


Las masacres que tuvieron lugar durante el reinado de Stalin se cometieron en el nombre del estatismo, no del ateísmo, y el estatismo es un subproducto del modo de pensar fundamentalista religioso.

Toda religión, desde tiempo inmemorial, ha reconocido el papel que juega la religión en sofocar el desacuerdo y en tener quieta y sumisa a la gente. Carlos I de Inglaterra, por ejemplo, dijo una vez que "la religión es el único fundamento firme del poder".

Stalin no quería compartir ese poder con nadie. Reconociendo que la Iglesia era el único rival significativo para su supremacía, él la atacó. Sus ataques no tenían nada que ver con diferencias ideológicas; era meramente cuestión de erradicar lo que él percibía como una amenaza.

La prueba definitiva de que Stalin no actuaba en base a principios ateos pudo verse cuando sonaron los primeros disparos de la Operación Barbarroja* en la Segunda Guerra Mundial. Las cosas no iban bien para los ejércitos rusos por ese entonces, y Stalin, previendo una posible revolución en el frente doméstico, buscó formas de amasar una amplia base de apoyo para el esfuerzo bélico. Para lograrlo, reinstituyó la jerarquía de la Iglesia Ortodoxa para servir a la "Madre Rusia". Esto muestra que Stalin de ningún modo era reacio a promover la religión si hacerlo servía a sus propósitos.

Evidentemente, la tiranía de Stalin se basaba en las premisas totalitarias que aprendió de la religión: obediencia ciega, reverencia a una figura divina (en forma humana), así como una visión utópica de castillos en el aire. Su gobierno nunca toleró la libertad de pensamiento. Las políticas de Stalin fueron la antítesis de la filosofía atea.


De hecho, uno puede formar un argumento histórico mucho más convincente al igualar el cristianismo con el fascismo que al ateísmo con el comunismo. El cristianismo ha mostrado sus rasgos totalitarios en incontables ocasiones a través de la historia. Cada vez que un país ha basado su gobierno en principios fundamentalistas cristianos, ese país se ha convertido en una dictadura. Tales gobiernos jamás han tolerado la disidencia ni los puntos de vista opuestos, y nunca han dudado en usar la violencia para imponer su voluntad. Esta actitud puede rastrearse hasta la más temprana historia de la Iglesia y hasta la Biblia misma. Las doctrinas bíblicas que los déspotas han encontrado ser invaluables para ellos incluyen la obediencia a la autoridad, el menoscabo de la razón humana, la visión de la humanidad como intrínsecamente mala, y la creencia de que esta vida es de importancia secundaria respecto de una vida posterior imaginaria. Doctrinas como ésta tienden a debilitar las resistencias y a hacer a la gente más susceptible a la influencia política. Habría que tener esto en mente al escuchar los puntos de vista de los dirigentes religiosos y políticos actuales. Para estar seguros, ellos frecuentemente hablan de moralidad, amor y compasión, pero subsiste el hecho de que el amor cristiano históricamente siempre ha sido un amor condicionado, aplicable sólo a los cristianos del mismo bando; los que no se convertían eran sometidos a cruzadas, inquisiciones, quemas, torturas y muerte. En tiempos más ilustrados, gracias a la influencia de los principios humanistas de la Ilustración, estas prácticas han sido eliminadas en su mayoría, pero el ostracismo social sigue siendo una poderosa arma contra el disenso.

Los horrores forjados por el cristianismo no pueden ser dejados de lado como si fueran historia antigua sin importancia. En el siglo XX fue el Vaticano quien primero apoyó y reconoció al fascismo, considerándolo un arma poderosa contra el "comunismo ateo". El Vaticano apoyó a los distintos vástagos del gobierno fascista en el período de entreguerras, dando reconocimiento diplomático a Mussolini en 1929 y jugando un papel instrumental en la formación del gobierno de la Francia de Vichy, la España de Franco, y el gobierno Ustacha de Croacia.


El caso de Croacia es particularmente interesante. Durante la Segunda Guerra Mundial, la población de Croacia sufrió, en proporción al tamaño del país, mayor pérdida de vidas que cualquier otro país durante la guerra. Muchos de los campos de concentración eran dirigidos por sacerdotes católicos, entre ellos el legendario campo Jasenovac, conocido como "el pozo de la muerte", que fue dirigido por el padre Miroslav Filipovic.

El apoyo del Vaticano a Hitler es también materia de registros históricos. El Vaticano firmó un tratado con la Alemania Nazi el 20 de julio de 1933. Hitler se refirió varias veces a sí mismo como cristiano tanto en sus discursos como en sus escritos, y nunca fue excomulgado por la Iglesia Católica. A todo soldado nazi se le exigía llevar una cinta con la inscripción "Got mit uns", que significa "Dios con nosotros".

Hubo numerosos seguidores nazis también en los Estados Unidos. Dos de los más rabiosos antisemitas de esta época fueron pastores eclesiásticos, el Reverendo Gerald L.K. Smith (1898-1976) y el padre Charles Coughlin (1891-1979), el que dijo que "La guerra de Alemania es una batalla por el cristianismo".

Son notables las semejanzas ideológicas entre el fascismo nazi, el comunismo soviético y el cristianismo. El racismo es un componente medular y esencial de todos ellos; los cristianos y los nazis persiguieron a judíos y no creyentes, y los soviéticos, debido a sus orígenes eslavos, veían a todos los demás como intrínsecamente inferiores. Podemos seguir el rastro de esa ideología hasta los tiempos de los antiguos hebreos, quienes se veían a sí mismos como "el pueblo elegido". Justo allí se encuentra la receta para una ideología etnocéntrica y racista.

Hay otras semejanzas ideológicas más. Todas tienden a ser etnocéntricas, a considerar el mundo a su alrededor como esencialmente malo, y todas tienden a verlo todo en términos simplistas, dualistas: Nosotros contra Ellos, el Bien contra el Mal, etc. Éste es un hecho muy importante que debe recordarse cuando los fanáticos religiosos actuales insistan en que todos sigan los absolutos de su religión.

El ateísmo se basa en los principios de la razón, la libertad y los derechos individuales. Se opone a todas las formas de ideología totalitaria. Sí, es cierto que hay individuos ateos que son también comunistas. Sin embargo, el intento de ligar a todos los ateos y a todos los comunistas bajo las mismas banderas ideológicas es insostenible cuando se revelan los hechos. Pero entonces, ¿qué tiene que ver la fe con los hechos?

* Operación Barbarroja: nombre clave del plan nazi para la invasión de la Unión Soviética por la Alemania hitleriana, que comenzó el 22 de junio de 1941 (N. del T.).

El aporte Cristiano a la causa Judia.

En el año 1232 el Papa Gregorio IX se queja a los Obispos de Alemania que los judíos están siendo tratados bien. El Papa prohíbe las relaciones amigables entre cristianos y judíos.
El Obispo de Lincoln establece en el año 1235 que los judíos deben ser esclavos de los gobernantes de la tierra. Declara que por tener encima la marca de Caín, deben ser condenados a vagar por la tierra para siempre y no matarlos para que cumplan la condena de Caín.
1235, Fulda/Alemania: 34 hombres y mujeres judios asesinados.

En 1236 Santos Cruzados atacan las comunidades judías de Anjou, Poitou, Bordeaux y Angouleme. Se convierten 500 y 3000 son muertos. El Papa Gregorio IX quien organiza la cruzada se horroriza de los hechos.

Entre los años 1239 y 1242 todas las copias del Talmud son confiscadas por las ordenes Franciscanas y Dominicanas por orden del Papa Gregorio IX. Solo se tiene documentación de las ordenes acatadas en Francia e Inglaterra, donde los libros del Talmud fueron confiscados y quemados rápidamente. En Paris 24 carros llenos de Talmuds fueron quemados en un solo evento. Mas tarde el Papa Inocente IV ordena el retorno de algunos libros pero con los cambios necesarios hechos por la Iglesia.
En 1244 la comunidad judía de Londres es acusada de asesinatos ritualísticos y multada con grandes cantidades de dinero.
Durante 1247 las acusaciones de asesinatos ritualísticos se propagan por doquier y causan muchas atrocidades. El Papa Inocente IV ordena una investigación sobre el tema.
En 1255 el cuerpo sin vida del Pequeño San Hugo de Lincoln es descubierto en un pozo ciego cerca de la casa de un judío. Bajo tortura este confiesa que Hugo fue asesinado como parte de un ritual. El Rey Enrique III lo condena a la horca después de ser arrastrado por las calles del pueblo atado detrás de un caballo. Cien judíos son llevados a Londres para ser enjuiciados, 18 son colgados sin juicio, 79 son encontrados culpables y sentenciados a la horca, 2 son perdonados y 1 encontrado inocente.
Entre los años 1261 y 1264 los estudiantes de Canterbury, sacerdotes y monjes atacan reiteradas veces al barrio judío. La muchedumbre saquea la sección judía de Londres en 1262 y 1264.
En 1263 una discusión teológica toma lugar en Barcelona, España ante el Rey Jaime I, la nobleza, los obispos, y monjes ilustres. El Rabino Moisés ben Naleman defiende al Talmud ante un converso de nombre Pablo Cristiani, quien trata de probar la verdad cristiana usando el Talmud. El Rey Jaime ordena borrar todos los párrafos del Talmud que eran objetados por los cristianos.

El Sínodo de Viena de 1267 decreta que para los cristianos queda prohibido el asistir a ceremonias judías. Se le prohíbe a los judíos educados tener conversaciones con cristianos analfabetos y los judíos son obligados a usar sombreros con dos puntas llamados pileteum cornutum. El pueblo en general cree firmemente que los judíos tienen cuernos y que usan tal sombrero para esconderlos, lo cual comprueba mas allá de cualquier duda que son hijos del diablo.

Entre 1266 y 1274 Santo Tomas de Aquino afirma que los judíos no deben ser tratados como vecinos pero si deben ser condenados a perpetua servidumbre.

Durante el año 1270 las ciudades alemanas de Weissenberg, Magdeburg, Sinzig, Erfurt entre otras experimentan asesinatos en masa de judíos. En Sinzig toda la comunidad es encerrada en la sinagoga y quemada viva.

En 1272 se cierra la principal sinagoga de Londres. La razón del cierre fue que los cánticos judíos molestaban a los monjes católicos del barrio. Los judíos deciden congregarse en domicilios privados, pero eso también es prohibido por el Obispo de Londres.
La Statum Judeísmo de 1275 es decretada en Inglaterra por el Rey Eduardo I. La ley prohibía a los judíos cobrar intereses, restringía sus áreas de residencia y ordenaba a todos los judíos mayores de 7 años a usar el distintivo y a los mayores de 12 el pago de un tributo anual para las Pascuas. La ley también permitía por primera vez el poder alquilar tierra para cultivo y la posibilidad de trabajar como comerciantes o artesanos.

En el año 1278 el Rey Eduardo I acusa a los judíos de limar monedas. Allanamientos a todos los domicilios privados en Inglaterra toman lugar. Como resultado de las requisas 680 judíos son encerrados en la torre de Londres Muchos fueron Colgados y sus propiedades confiscadas.
En 1280 las autoridades civiles polacas son benéficas hacia los judíos al tratar de integrarlos a la vida nacional. Las autoridades cristianas se oponen energéticamente y los judíos tienen que continuar viviendo en aislamiento.

El Sínodo de Buda introduce la nueva versión del distintivo judío.
En España los judíos son obligados a escuchar sermones de conversión por monjes en sus propias sinagogas. Hordas fanáticas atacan a los judíos.
En un sábado de enero de 1281 la mayoría de los judíos españoles son arrestados en las sinagogas, solamente para ser liberados después de pagar altos rescates.
Inglaterra 1282. El Arzobispo de Canterbury cierra todas las sinagogas de su diócesis.
Entre los años 1283 y 1285 diez judíos de Mainz son asesinados por muchedumbres callejeras debido a acusaciones de asesinatos ritualísticos.
26 judíos son muertos en Bacharach acusados de asesinatos ritualísticos.
40 judíos son asesinados en Oberwellel bajo cargos de asesinatos ritualísticos.
180 judíos son quemados vivos en una sinagoga de Munich después de ser acusador de asesinatos ritualísticos.

El 18 de Julio de 1290 el Rey Eduardo I decreta que todos los judíos de Inglaterra deben de abandonar el país antes del primero de noviembre o enfrentar la pena de muerte.
1290 Bohemia (Polonia) 10,000 judios muertos.

Durante el año 1298 severas persecuciones toman lugar en Fraconia, Bavaria y Austria. Un noble alemán llamado Rindfleisch alias el “matajudíos” (judenslachter) organiza un pequeño ejercito y comienza su campaña de exterminio de ciudad a ciudad. En alrededor de seis meses matan y queman vivos alrededor de 100,000 judíos de 140 comunidades incluyendo Wurzburg, Ratisbon, Nuremberg, Augsburg, Heilbronn y Rottinggen.

El 22 de julio de 1306 el Rey Felipe IV encarcela a los 100,000 judíos de su reino y son ordenados a salir del reino en menos de un mes. Se les ordena llevar consigo solamente las ropas que llevan puestas y comida para un día. Las propiedades que dejan son confiscadas por el Rey Felipe para surtir de nuevo el Cofre Real el cual había sido vaciado por los conflictos con el Papa y las guerras contra Flandes.

En el año 1308 el Obispo de Strasbourg, John de Dirpheim pide el arresto de los judíos de Sultzmatt y Rufach bajo los cargos de profanación de ostia. Todos son quemados en la hoguera.
El Rey Luis X de Francia en1315 permite el regreso de los judíos expulsados, con la condición de seguir usando el distintivo.
El Papa Juan XII ordena la inquisición de Toulouse de 1320. Allí y en Perignon el Talmud es quemado.
Durante la Cruzada de los Pastores, 40,000 pastores y campesinos marchan de Agen a Toulouse y matan a todos los judíos que no están dispuestos a convertirse. En Verdun 500 judíos se refugian en una torre. Cuando se sienten perdidos al ser sitiados comenten suicidio.
120 Comunidades judías del sur de Francia y el nordeste de España son arrasadas.
Los fervientes sermones cristianos de los monjes anti-judíos locales incitan al pueblo de Estella a linchar a miles de judíos en el año 1328 .
1337 Empezando en Deggendorf/Alemania una caceria de judios llega a 51 pueblos en Bavaria, Austria y Polonia. [DO41]
El Obispo John de Dirpheim causa la masacre de los judíos en Strasbourg en el aniversario de la conversión de San Pablo del año 1338.

Durante la peste de 1348 los judíos de España fueron acusados de envenenar los pozos de agua de los cristianos. En Francia, España y Suiza los judíos son asesinados por el pueblo creyendo que la peste es causada por el envenenamiento de pozos de agua por parte de los judíos.
10,000 judíos son asesinados por las hordas en ciudades cercanas a Alemania a pesar de la protección ofrecida por el Rey Casimir

El mayor de Strasburg, Conrad de Winterthur, junto con las autoridades civiles de la ciudad defienden a los judíos de la ciudad contra las acusaciones de los Obispos.
Todos los judios de Basel/Suiza y Strasbourg/Francia (2000) quemados. [DO41]
En el año 1349 la comunidad judía de Basle es quemada viva en una estructura específicamente construida para el evento.