martes, agosto 29, 2006

Nuevos links

Rufus Cause: Tiene un buen blog.
Anabombom Cause: She`s hot.
Cry Pandora Cause:Nos linkea de vuelta.
DiGigi Cause:Una colega (Blog italiano)
Pirata azul Cause: Nos linkea y es emelecista.

domingo, agosto 27, 2006

El post de la semana: Rufus escribe:

L a llamada anónima

Recuerdo perfectamente como el día 4 de un mes indeterminado recibí una llamada telefónica de un número oculto. Normalmente acostumbro a atender este tipo de llamadas camufladas por un instinto básico de cordialidad social, pero a fe de Dios que me gustaría tener algún tipo de filtro mental que me hiciera actuar de una forma más expeditiva.
Pero esto son hipótesis soñadas porque el hecho es que descolgué para después preguntar mecánicamente:

"¿SÍ? ¿DIGA?"

"¿SÍ? ¿OIGA? PERDONE, SOY GENARO ¿QUE ESTÁ ANTONIO? ¿EH?"

Mi interlocutor resultó ser un hombre de edad avanzada, algo desorientado, como desconcertado, y con una sordera bastante pronunciada.

"¿ANTONIO DICE? NO SÉ DE QUIEN ME HABLA, ME PARECE QUE SE HA EQUIVOCADO"

"¿EH? ¿ES AQUÍ DÓNDE ANTONIO? ¿EH? SOY GENARO, LLAMO DESDE UN TELÉFONO PEQUEÑO, NO ES MÍO, NO SÉ COMO VA ESTO. ES UN MÓVIL DE ESTOS QUE NO SE NOTAN. NO ES MÍO, ES DE NATALIA, LA JOVEN DE…"

"AH, INTERESANTE, GRACIAS POR COMPARTIR ESTA INFORMACIÓN RIDÍCULA CONMIGO. PERO LA VERDAD ES QUE NO CONOZCO A NINGÚN ANTONIO DIGNO DE SER RECORDADO. USTED SE EQUIVOCA DE NUMERO. A SIDO UN ERROR HUMANO, NO SE PREOCUPE NO LE GUARDO RENCOR"(aquí ya empezaba a ponerme en plan pedante insufrible, es lo que me pasa, cuando bajo la guardia se me dispara el piloto automático).

"ESCUCHE JOVEN"

"LE ESCUCHO BUEN HOMBRE, NO SE REPRIMA"

"¿PERO DE QUE HABLA?"

"ESTO DEPENDE DEL INTERLOCUTOR DE TURNO, SOY MUY FLEXIBLE YO, UN HOMBRE DE RECURSOS, VAYA"

"¿EH? NO ENTIENDO NADA, ¿QUE SE ENROLLA?" Esto no funciona Luis, no sé de que me habla... (dijo a alguien que tenia al lado mientras apartaba el aparato (un tal Lluis deduzco))"¿QUE PASA CON ANTONIO?"

"HOMBRE GENARO, SI YO LE EXPLICARA YA NO SERIA UN SECRETO"

"¿UN SECRETO? ¿QUÉ SECRETO?"

"EL DE ANTONIO Y LUIS"

"¿DE LUIS? ¿PERO QUE DICE DE LUIS? LUIS ESTÁ AQUÍ CONMIGO"

"YA LO SUPONGO, ESTA ES SU COARTADA"

"COJONES, NO SÉ DE QUE CARAJOS ME HABLA"

"GENARO, DEBE COMPRENDER QUE LOS GAYS TIENEN DERECHO A SALIR DEL ARMARIO A CUALQUIER EDAD, POR MUY AVANZADA QUE SEA. SEAMOS COMPRENSIVOS GENARO"

"¿QUE DICE USTED? ¿CÓMO SABE QUE YO SOY GENARO? ¿DÓNDE ESTÁ ANTONIO? ¡COJONES! ¡CAGON DIOS!"(estaba como enfadado, subiendo el tono de voz con una excitación muy desagradable)

Ten, habla tú con este pajaro, que parece que te conoce, Luis.

¿Que me conoce a mí?
"¿DIGA?"


"HOMBRE, HOLA LUIS ¿CÓMO VA LA COSA? TÚ Y GENARO ¿EH? QUÉ PAREJA DIOS MÍO. CUANDO ENCONTREMOS AL ANTONIO YA PODREMOS REFUNDAR EL TRÍO CALAVERA"

"¿EHHH? ¿PERO QUE ES ESTO? PERDONE MUCHACHO PERO NO ENTIENDO DE QUE ME ESTÁ HABLANDO NI DE QUE NOS CONOCE ¿QUIEN ES USTED Y QUE SABE DE ANTONIO?" (vaya, parecía que este segundo individuo no era sordo, tengo que reconocer que cuando pierdo el control puedo pecar de imprudente)

"MIRE QUE SE HAN EQUIVOCADO DE NUMERO, YO NO TENGO NADA QUE VER CON LA FUGA DE ANTONIO"

"¿DE QUÉ FUGA ME HABLA? ¿QUE ME QUIERE TOMAR EL PELO? MIRE QUE YO LE ENTIENDO Y USTED A MÍ NO ME LA METE. YO NO ESTOY TAN COLGADO COMO EL GENARO"

¿Quee? ¿Que dices de mí?

Calla cojones, que este es un gamberro.

¿Un gamberro? "¡MAL PARIDO! ¿DÓNDE ESTÁ ANTONIO?"

"HOMBRE GENARO ¿SABE DÓNDE ESTÁ LUIS? HACE UN RATO QUE ESTABA HABLANDO CON ÉL"

"¿EHHH?"

Genado trae el aparato cojones, que tú no te enteras de nada

¿Que dices de Malta?

"ESCUCHA CHAVAL, TERMINEMOS CON ESTA COMEDIA. ¿DE QUE NOS CONOCES TÚ A NOSOTROS?"

"HOMBRE LUIS, EN CONFIANZA, A MÍ LA QUE ME MOLA, ASÍ DE ENTRADA, ES LA NATALIA ¿QUE ESTÁ BUENA?"

"¿NATALIA? ¿DE QUE LA CONOCES A NATALIA TÚ?"

"UY, SI YO LE EXPLICASE, MI NATALIA"

¿Le has dicho algo de Natalia a este pelagatos?

¿Ehh? ¿Que pasa con Natalia? ¿Que está con Antonio?

Anda, calla que no entiendes nada...

¿Que dices de Malta? ¿Pero que manía tienes tú ahora con Malta? hostias

Genaro, deja de decir paridas, cojones "MIRA CHAVAL, CONTESTA, ¿QUE SABES DE NATALIA?"

"DE HECHO NO EN SÉ NADA, TE PREGUNTABA SI ESTABA BUENA, LUIS, COLEGA"

"¿BUENA? CLARO QUE ESTÁ BUENA, PASÓ LA EPIDEMIA DE GRIPE HACE DOS MESES, COMO CASI TODO EL MUNDO"

"NO. YO HABLO DE TETAS Y CULO, DE LA PECHONALIDAD

"¿EHHH?"

¿Porque dices ehhh Luis?

Calla Genaro "¿DICES TETAS?"

"SI, LOS PECHOS DE NATALIA, ¿QUE TAL ESTÁ EL MATERIAL?"

Este tío está hablando de los senos de Natalia.

¿Ehh? ¿Los senos de Natalia? ji ji si que son bien grandes ¡Dios mío! ji ji ji

Genaro, sordo cabrón, esto si que lo has oído.

¿Eh? ¿Ehhh?

"ESCUCHAME HIJO DE PUTA, NO ME IMPORTA QUIÉN PUÑETAS ERES PERO... ¿CÓMO SABES TODO ESTO DE NOSOTROS?"

"¿TODO ESTO? DE HECHO NO SÉ GRAN COSA"

"¿CÓMO SABES QUIÉNES SOMOS TODOS NOSOTROS?"

"FÁCIL. YO ESTABA ESPATARRADO EN EL SOFÁ TOCÁNDOME LAS PELOTAS, Y HABLO EN EL SENTIDO LITERAL DE LA PALABRA. CUANDO DE PRONTO HE RECIBIDO UNA LLAMADA OCULTA EN MI MÓVIL. RESULTA QUE ERA UN VIEJO MEDIO SORDO CON TENDENCIA A GRITAR QUE ME HA EMPEZADO A EXPLICAR SU VIDA. SE LLAMA GENARO, SI MIRAS AL LADO SEGURO QUE LO VES CON CARA DE IDIOTA Y PREGUNTÁNDOTE QUE PASA. ESTE INDIVIDUO EXECRABLE NO PARABA DE PREGUNTAR POR UN TAL ANTONIO DESAPARECIDO, COSA QUE, SEA DICHO DE PASO, CADA VEZ ENCUENTRO MÁS LÓGICA. DESPUÉS, COMO QUE NO ENTENDÍA NADA DE LO QUE YO LE DECÍA, HE SABIDO QUE USTED ES LUIS, QUE TODO Y NO SER TAN PATÉTICO, TAMPOCO ES DEMASIADO AVISPADO, COMO SI DIJÉRAMOS. Y PARA TERMINAR, SÉ QUE ME LLAMAN DESDE EL MÓVIL DE UNA TAL NATALIA, QUE TIENE UN BUEN PAR DE MELONES, PORQUE ME LO HAN DICHO USTEDES MISMOS ¿ALGUNA DUDA MÁS O LE HAGO UN DIBUJO?"

.......

¿Ehh? ¿Que pasa Luis? ¿Habla de las tetas de Natàlia? ji ji ji

¡Calla burro!

¿Ehh? ¿Burro yo?

"HIJO DE PUTAAA CABRÓN DE MIERDA DESGRACIADO MAL NACIDO"

CLIC

Silencio


Colgó con una brusquedad que personalmente encontré excesiva.


El hecho es que la historia no acaba aquí. Un par de días más tarde volví a recibir una llamada de Genaro, esta vez sin ocultar el numero, seguía sin entender nada y no me reconoció. Me apunté el número y llamé pasadas unas semanas, se puso una chica de voz bonita. Expliqué una trola bastante rebuscada sobre la infinidad de llamadas que no paraba de recibir desde su numero. Ella cayó de cuatro patas porque, por lo visto, de Genaro se lo cree todo. Me estuve haciendo el simpático durante un tiempo bastante prolongado hasta que un día le confesé todo. Al principio no se lo creyó, estaba acostumbrada a mis bromas absurdas pero finalmente, ante mi insistencia, y atando algunos cabos, vio que era verdad.

"...Y QUE SEPAS NATALIA MÍA, QUE EL HECHO DE QUE HAYA SEGUIDO EL JUEGO DURANTE TANTO TIEMPO, ES SIMPLEMENTE POR QUE TIENES UN BUEN PAR DE TETAZAS. ESTO HA SIDO MI INSTINTO MÁS PRIMARIO, LA GASOLINA QUE MOVÍA EL VEHÍCULO DE MIS ACTOS. SOY UN INDIVIDUO SOFISTICADO Y FASCINANTE YA LO SABES, PERO COMO DICEN LOS ESPAÑOLES, "TIRAN MAS DOS TETAS QUE DOS CARRETAS" ¿NO ESTARÁS ENFADADA VERDAD PRINCESA?"


silencio frío y prolongado



"PERO MIRA QUE LLEGAS A SER CABRÓN"


CLIC


ti ti ti tiiiiiiii


Me dejó con la palabra en la boca, no sé porque le confesé la verdad. A veces me sale la vena sincera, y esto, en este mundo mentiroso y podrido, es siempre mi perdición. ¿Pero que se esperaba aquella tontaina? Si me había conocido telefónicamente; su reacción no tiene ni pies ni cabeza. Es una esnob idiota. La verdad es que todo y ser una relación efímera y algo irreal creó cierta sensación de vacío dentro de mí. La notaba a faltar, tenía aquella pequeña adicción que sólo el tiempo y los viajes en tren pueden mitigar. (y estoy seguro, que ella, tenía sentimientos recíprocos y luchaba con ella misma para no llamarme de nuevo).

Ha ha ha ha... que sufra por mí la muy cerda vanidosa que se hace la estrecha pero después seguro que es una fulana del copón. Si las conozco yo a estas zorras liberales

Hace meses que espero espatarrado en el sofá pero no llama. Si que tiene fuerza de voluntad la muy guarra. Pero yo tengo más paciencia que ella y ya caerá en mis redes. Hace unos días llamaron por error pero era un niño que se tiraba pedos con la boca.

.......

Texto original: http://abismes1.blogspot.com/

EL PAYASO ASESINO



El lector que a partir de ahora va a adentrarse en la historia real de John Wayne Gacy descubrirá que el mal humano se esconde en lugares todavía menos accesibles que una arteria cerebral colapsada, la que tenía Gacy desde que se cayera en el jardín de su casa cuando era niño y que, según algunos expertos, transformó su cerebro en una mente psicopática. Quizás el mal anide en las entrañas del alma de algunos hombres que parecen, pero sólo parecen, buenos.


No cabría otra forma de calificar a un ciudadano tan ejemplar como John. Era un eficaz hombre de negocios, dedicado plenamente a hacer crecer su empresa de albañilería y decoración, a cuidar de su casa, a amar a su segunda esposa y a cultivar las relaciones sociales. El tiempo libre siempre lo dedicaba a los demás: organizaba las fiestas vecinales más famosas del barrio, se vestía de payaso y amenizaba las tardes de los niños ingresados en el hospital local. Incluso fue tentado por la política y se presentó como candidato a concejal. Y lo habría llegado a ser si no se hubiera cruzado en su camino el joven Jeffrey Rignall y su tenaz lucha por la supervivencia.

El 22 de mayo de 1978, Rignall decidió salir a tomar unas copas en alguno de los bares del New Town de Chicago. Mientras paseaba, ya de noche, un coche le cortó el paso. Un hombre de mediana edad y peso excesivo se ofreció para llevarle a la zona de bares más famosa del lugar. Rignall, osado, despreocupado, acostumbrado a viajar haciendo auto stop y, sobre todo, harto de pasar frío, aceptó la invitación sin sospechar que aquel hombre, en un descuido, le iba a atacar desde el asiento del conductor y a taparle la nariz violentamente con un pañuelo impregnado de cloroformo.

Con el hígado reventado por el cloroformo

Lo siguiente que Rignall pudo recordar fue la imagen de su nuevo colega desnudo frente a él, exhibiendo una colección de objetos de tortura sexual y describiendo con exactitud cómo funcionaban y cuánto daño podrían llegar a producir. Rignall pasó toda la noche aprendiendo sobre sus propias carnes mancilladas una y otra vez la dolorosa teoría que su secuestrador iba explicando. A la mañana siguiente, el joven torturado despertaba bajo una estatua del Lincoln Park de Chicago, completamente vestido, lleno de heridas, con el hígado destrozado para siempre por el cloroformo, traumatizado… pero vivo. Tenía el triste honor de ser una de las pocas víctimas que escaparon a la muerte después de haber pernoctado en el salón de torturas de John Wayne Gacy. En sólo seis años, 33 jóvenes como él vivieron la misma experiencia, pero no pudieron contarlo. A veces, el camino hacia el mal es inescrutable, se esconde y aflora, parece evidente y vuelve a difuminarse. Toda la vida de Gacy resultó una constante sucesión de idas y venidas. Fue torpe en los estudios, se matriculó en cinco universidades y tuvo que abandonarlas todas; sin embargo, terminó su último intento de estudiar Ciencias Empresariales y se licenció con brillantez. Hasta llegó a ser un hábil hombre de negocios.

Se enroló en cuantas asociaciones caritativas, cristianas y civiles pudo, pero mantuvo una oscura relación con su primera esposa, llena de altibajos y cambios de temperamento. Tuvo dos hijos a los que amó y respetó, sin que eso nublara un ápice su eficacia para atraer y matar a otros adolescentes. Resulta, incluso, paradójico que un hombre obeso y aquejado de graves problemas en la espalda fuera capaz de atacar, maltratar, matar y enterrar a jóvenes llenos de vigor. Pero lo hizo una y otra vez, hasta en 33 ocasiones.

Algunos detalles premonitorios

Pero si fue doloroso encontrar los cadáveres de 33 jóvenes incautos, peor resultó saber que su asesino ya había dado muestras de lo que era capaz de hacer. Poco después de casarse por primera vez, comenzaron a circular insistentes rumores sobre la tendencia de Gacy a rodearse de jóvenes varones. Rumores que sus vecinos vieron confirmados cuando el amable John fue acusado formalmente por un juez de violentar sexualmente a un niño de la ciudad de Waterloo. Él siempre sostuvo que las acusaciones no eran más que un montaje creado por el sector crítico de una de las asociaciones cívicas a las que pertenecía. Pero cuatro meses más tarde, la mesa del juzgado recibía la documentación de una nueva denuncia. La propia víctima del supuesto ataque sexual había sido apaleada. El agresor, un joven de 18 años con dudosa reputación, declaró que fue Gacy quien le pagó para escarmentar al niño que le acusaba. El caso estaba claro: Gacy fue sentenciado a 10 años de prisión en la penitenciaría de Iowa. La historia de un asaltador de menores parecía tocar felizmente a su fin…, cuando en realidad, no había hecho más que empezar. Incomprensiblemente, Gacy salió de la cárcel un año y medio después, aireando un indulto concedido en atención a su buen comportamiento y las "evidentes muestras de reforma dadas por el reo". El juez no tuvo duda de que aquel preso de 27 años se había transformado en otro hombre: lo que no supo hasta tres años después es que el nuevo John Wayne Gacy era aún peor.

Gacy no sólo se las arregló para engañar al juez, también engañó a los vecinos de Sumerdale Avenue que lo acogieron en su segunda vida; a Lillie Grexa, una mujer divorciada y madre de dos hijos que se enamoró de él y aceptó su propuesta de matrimonio; a los clientes de una brillante empresa de reformas de albañilería que él mismo montó y, lo que es peor, a decenas de jóvenes varones que acudían a casa de Gacy bajo la promesa de un trabajo bien remunerado como albañiles.

Un jardín que olía demasiado mal

La vida social del hombre que los fines de semana se vestía de payaso para entretener a los niños enfermos en varios hospitales subía como la espuma. Dos de sus fiestas más sonadas, una al estilo "vaquero" y otra hawaiana, llegaron a congregar en su casa a más de trescientas personas. Todas regresaron a sus domicilios comentando dos cosas: lo agradable que era aquel ciudadano regordete, bonachón y trabajador y lo mal que olía su jardín. Porque era la comidilla del barrio que un terrible hedor fluía por las calles cercanas a la casa de Gacy y su segunda esposa. Ésta estaba convencida de que bajo las cañerías de su casa había algún nido de ratas muertas. Él aseguraba que el olor se filtraba desde un vertedero cercano y siempre estaba posponiendo una supuesta visita al ayuntamiento para tratar de arreglar el problema. Ningún vecino supo reconocer el tufo de los restos humanos, por eso, ninguno llegó a sospechar el acontecimiento que estaba a punto de sacudir la armoniosa vida de Sumerdale Avenue.

En diciembre de 1978, la madre del joven de 15 años Robert Piest empezó a impacientarse al ver que no regresaba del trabajo. El chico se ganaba un dinero extra ayudando en una farmacia, y estaba a punto de entrevistarse con un tal Gacy que le había ofrecido mejorar su situación si trabajaba como albañil para él. La desaparición de Robert fue puesta en conocimiento del teniente Kozenczak del departamento de policía de Des Plaines. Entre sus pesquisas, el agente hizo una llamada a Gacy, ya que su nombre aparecía entre los papeles del chico. Por supuesto, el ciudadano Gacy no acudió a la cita (se excusó diciendo que estaba enfermo), pero se presentó voluntariamente en la comisaría al día siguiente. Para entonces, el teniente se había encargado de estudiar el historial penal de aquel hombre (sentenciado e indultado por asaltar a un menor). Aunque Gacy negó cualquier relación con Piest, la policía logró una orden de registro de su domicilio en la que se incautó del más completo arsenal de instrumentos de tortura jamás visto en la región. Pocos días hicieron falta para lograr que Gacy confesara y entregara a la policía un detallado plano del jardín de su casa, en el que había marcado los lugares donde yacían los 33 cadáveres.

En su declaración final, la vida del payaso asesino pareció sacada de una película de terror. Durante el juicio, Gacy aseguró que existían “cuatro John: el contratista, el payaso, el vecino y el asesino y constantemente respondía con las palabras de uno y de otro”. Lo que no pudo explicar fueron los motivos que le llevaron a dejar con vida al joven Rignall, cuya declaración sirvió para mandar al criminal a la camilla donde se le aplicó una inyección letal el 10 de mayo de 1994. Sus últimas palabras fueron : “¡Besadme el culo!”


De día actuaba como el "Payaso Pogo" para niños enfermos hospitalizados.

jueves, agosto 24, 2006

ISSEI SAGAWA - CONFESIONES DE UN CANIBAL



Este japonés de baja estatura, media 1,50 mts. Sus manos y pies pequeños, incluso su voz era de mujer. Había mencionado en algunas entrevistas que era el tipo de hombre que la mayoría de mujeres no encontraría atractivo. Conocedor de su falta de atractivo físico y de su extrema timidez, estaba obsesionado con tener a su lado "la mujer perfecta".

En el libro "Asesinos Caníbales" de Moira Martingale, describen a Issei Sagawa como un estudiante japonés inteligente, obsesionado con las mujeres altas de rasgos occidentales. Su fantasía se hizo realidad mientras estudiaba Literatura Inglesa en la Universidad de Wako en Tokio, ahí se relaciono con una mujer alemana que daba clases de idiomas. "Cuando me encontré a esta mujer en la calle," dijo después al reportero británico Peter McGill, "me pregunté si podría comerla". Un día de verano, se metió través de la ventana a su apartamento e intento en matarla. Para su deleite, ella estaba dormida y tenia ropa pequeña que cubría algo de su cuerpo. Busco algo para apuñalarla o golpearla y descubrió un paraguas.

Sin embargo, antes de que pudiera hacer algo, la mujer despierta y lo descubre, grita desesperada provocando la huida del intruso. Issei no olvida esta experiencia, había sido muy fácil estar cerca de una mujer atractiva y si era mas cuidadoso con el ataque, podría hacer realidad su fantasía. Empezó a investigar y vigilar a sus potenciales víctimas para planear sus ataques y no pudieran escapar. Su fantasía se vuelve hacer realidad cuando viaja a París y encuentra a la mujer que nunca pudo sacar de su mente. Su piel blanca, la forma carnosa de sus nalgas y sus bonitos senos le habían provocado perdida de la razón. Empezó a conquistarla. Sagawa creía que el amor que sentía por las mujeres que le gustaban lo podía demostrar comiéndoselas.


Al llegar la policia encontro el cadaver en este estado (he quitado calidad a la foto y la he reducido pues es bastante desagradable).


EL RITUAL
Mientras estudiaba en el Censier Institute de Paris en 1981, Sagawa conoce a una mujer alemana, alta, rubia y bonita llamada Renee Hartevelt. Declaró luego que cuando se sentó a su lado en clase, se enamoro inmediatamente y no podía dejar de pensar en la piel blanca de sus brazos. Era la mujer perfecta para lo que tenia en mente, pero tenia que ser cuidadoso y preparar mejor su plan. Renee tenía 25 años, hablaba tres idiomas y con futuro prominente, su objetivo era un Ph.D. en literatura francesa. Sagawa le pidió que lo enseñara alemán, su padre multimillonario y podría pagarle cualquier sueldo. Ella aceptó. Le gustó su inteligencia, su conocimiento de pintura y literatura europea, le escribió cartas de amor, la invitó a conciertos y exposiciones de arte. Sagawa pequeño, con rasgos femeninos y además cojeaba. Renee salía a menudo con él y con frecuencia lo invitaba a su apartamento a tomar el té. Sus continua salidas a bailes, le dio a Sagawa un sentido mas real a sus macabras fantasías


Después del crimen, violo y durmió con el cadaver esa noche, era un "fetiche sexual".

Cierto día invito a Renee a cenar a su apartamento, le pidió que le leyera un poema de un escritor alemán, después de que ella salió, Sagawa olió y lamió el lugar donde ella se había sentado y juro que se la comería, esto le permitiría poseerla para siempre. A los pocos días la volvío invitar a cenar, con su equipo de reproducción grabo la lectura de su poema preferido con la voz de Renee, el 11 de julio de 1981 se preparó para hacer realidad su última fantasía. Al llegar a París, había comprado un rifle calibre .22 para su protección, hizo sentar en el suelo a Renee al estilo japonés para beber el té, en la bebida mezclo un poco de whisky para volverla más accesible, hablaron durante varias horas esperando que el licor en el té hiciera su efecto. Sagawa declaro su a amor a la bella alemana y trata de llevarla a la cama. Lo rechaza y le explica que solo quería ser su amiga.

Sagawa se le levanta desconcertado y mientras Renee se sienta en una silla trae un libro de poemas para que lo leyera y el caníbal japonés empieza a ejecutar su macabro plan, graba las ultimas palabras y luego le dispara con su rifle en la parte en el cuello, cae de la silla y le continua hablando pero ella no le responde. Se asusta al ver la gran cantidad de sangre que fluye de la herida, al principio intenta limpiar pero se rinde finalmente. Con gran esfuerzo desviste el cadáver y se pone contento por que ella ya no se negaría a su amor, ahora le pertenecía a él. Con un cuchillo le corta el pezón izquierdo y un pedazo de nariz para comerlos. “Yo corte su cadera”, escribió luego en su cuento titulado, “En la Niebla“ y se pregunto donde debería morder primero, selecciono las nalgas pero las encontró difícil de morder. Describe paso a paso su ritual, la apariencia de grasas, músculos y su sabor. Cuando la grasa sale por los cortes hechos con el cuchillo, la describió de consistencia y apariencia del maíz amarillo, la olió y encontró que no tenía ningún olor. Siguió cortando para encontrar la carne mas profunda, puso dos filetes en su boca “su sabor es de un rico pescado crudo similar al sushi, no he comido nada mas delicioso”, se encontraba feliz de haber cumplido su fantasía.

Usando un cuchillo eléctrico empezó a cortar a Renee en partes, hizo varios filetes para mordisquearlos crudos, el resto lo guardo en su refrigerador. Preparo una comida rápida de carne humana frita con mostaza, tomo fotografías del cadáver mutilado y tuvo relaciones sexuales con lo que quedaba de él. “cuando yo la abrazo”, grabo en una cinta de audio, “ella suspira y le digo que la amo”. Cuando cocinaba y comía de sus restos, escuchaba la grabación que Renee que había hecho de la lectura del poema, su ropa interior la usaba como servilleta para limpiar su boca. Al cocinar un seno le dio asco por su apariencia grasosa y encontró que los muslos eran más deliciosos. Exhausto finalmente, tomó lo que quedaba del cadáver, lo llevo a su cama y durmió con él.


Guardo restos del cadaver para alimentarse de ella días posteriores.

A la mañana siguiente tenia que librarse de la evidencia, al levantarse descubrió que el cuerpo no olía mal aún y continúo comiendo, en particular el brazo que le gustó mas del cuerpo, recorto el ano y lo puso en su boca, pero su olor muy fuerte y lo hizo escupir, intento comerlo friéndolo, pero eso no disminuyo su olor, se dio por vencido y lo devolvió al cadáver. Después de un cierto tiempo, varias moscas grandes pulularon alrededor del cadáver, Sagawa tomo esto como señal que había perdido a Renee. La “luna de miel” había terminado. Con un hacha la corto en pedazos más pequeños para meterla en una maleta que había comprado para este fin. Mientras la desmembraba se excita y con la mano del cadáver procede a masturbarse. Corta su nariz, sus labios y su lengua de varios mordiscos y las guarda para sus fantasías sexuales posteriores. Escribió: “Yo quiero su lengua, no puedo abrir su mandíbula, pero puedo alcanzarla entre sus dientes. Finalmente sale, la hago estallar en mi boca y me miró masticándola en el espejo. Luego voy por los ojos”. El paso final de Sagawa fue explorar los órganos interiores los cuales quemaron sus manos con los ácidos digestivos, con una hacha cortar la cabeza, la tomo por el cabello y la coloca frente de él, escribió: “Ahora comprendo que soy un verdadero caníbal”.

A la media noche del segundo día guarda todos los pedazos bajo llave en su maleta, llama un taxi y pide que lo lleve a Bois de Boulogne, lleva la maleta al parque y trata de botarla al lago, sin embargo, para su contextura física le era muy pesada. Cuando descubre que varias personas lo miran se asusta, las tira rápidamente y huye. Una pareja que paseaba por el lugar vio una mano de mujer llena de sangre y llaman a la policía. Mientras tanto Sagawa regresa a su apartamento a disfrutar de los filetes de Renee que tenía en su refrigerador, cada día que estuvo en libertad comió pedazos del cadáver.Issei Sagawa, tenia una lujuria sexual extrema, aun periodista británico le dijo que su compulsión por el canibalismo vino probablemente de un sueño de la niñez que lo dejo muy impresionado. El estaba en una olla hirviendo con su hermano, preparándose como una comida para alguien más. Así empezó sus fantasías caníbales y cambia su papel de “comida” a consumidor.

No estaba interesado en comer a mujeres de su propia raza, sentía apetito por mujeres altas, rubias y de piel blanca. La posibilidad de estar con una mujer de este perfil para Sagawa era remotas. En Tokio visito a un psiquiatra al cual confeso sus oscuros deseos, fue calificado como un persona muy peligrosa por el profesional, pero el padre de Sagawa encubrió el problema y envía a su hijo a otro país. Otros profesionales de salud mentales que lo evaluaron luego vieron tendencias peligrosas en él.


NINGUN JUICIO, SOLO FAMA
Cuando la policía llegó a su apartamento dos días después del asesinato con una orden de captura, los deja entrar, abrieron el refrigerador y encontraron pedazos de un cuerpo de una mujer, incluso los labios. Sagawa confeso lo que había hecho y agrego que tenía una historia medica con una enfermedad mental. De hecho, sus descripciones fueron detalladas así y el juez decidió que él no era competente para juzgarlo: estaba realmente loco. Sagawa fue condenado a un periodo indefinido de prisión en el asilo Paul Guiraud, los tres psiquiatras que lo evaluaron dijeron nunca se curaría. Su multimillonario padre, Akira Sagawa, presidente de Kurita Water Industries en Tokio, hizo un trato para que en 1984 su hijo fuera transferido al hospital psiquiátrico Matsuzawa en Japón. El fiscal creyó que allí estaría preso de por vida, pero solo permanece preso 15 meses y queda libre en agosto de 1985, de nuevo, gracias a su padre.

El temible caníbal libre, pide pasaporte para poder viajar a Alemania. Su situación de libertad le permitió dar entrevistas por televisión donde declaraba que la carne humana era una de los mejores alimentos, incluso accedió para aparecer en películas pornográficas japonesas y demás escribió cuatro novelas, en la describía los detalles de su asesinato, vendió más de 200,000 copias. Gracias a su padre, había escapado con un asesinato, y estaba muy orgulloso de él.


Actualmente Sagawa disfruta de la popularidad en los medios de comunicación, concede entrevistas y hace videos para complacer la curiosidad del voyeuristica de aquéllos que quieren acercarse a alguien que ha comido carne humana. Él ser el centro de atención le divierte y cree que lo que hizo no es extravagante. "El público me ha hecho el padrino de canibalismo," declaró, "y estoy contento feliz con eso." The Rolling Stones grabaron una canción llamada “Too much Blood” (Demasiada Sangre), Sagawa también probo suerte en el mundo del comic, escribió una columna semanal para un periódico, edita una antología sobre fantasías caníbales y fue portada de una revista gastrónoma japonesa. Bajo un seudónimo, trató de incursionar en el mundo del streaper.

En su web oficial, ofrece detalles sobre su crimen y defiende al canibalismo asegurando que no es un acto horrendo, ahí también exhibe ejemplos de sus pinturas y esculturas con las nalgas carnosas de hembras blancas. En un artículo de una revista, dijo que espera ser comido por una joven mujer occidental, porque, sólo un acto como ese lo salvara.

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Actualmente Sagawa disfruta de la popularidad en los medios de comunicación, concede entrevistas y hace videos para complacer la curiosidad del voyeuristica de aquéllos que quieren acercarse a alguien que ha comido carne humana. "El público me ha hecho el padrino de canibalismo," declaró, "y estoy contento feliz con eso."

martes, agosto 22, 2006

ALBERT FISH - EL ABUELO ASESINO


Nadie podía haberse imaginado que ese abuelito entrañable de más de 65 años, de rostro demacrado, cuerpo encogido y fatigado, cabello y bigote gris, ojos tímidos podía esconder una personalidad como la que revela su informe psiquiátrico: sadismo, masoquismo, castración y autocastración, exhibicionismo, voyeurismo, pedofilia, homosexualidad, coprofagia, fetichismo, canibalismo e hiperhedonismo.

Fish nace en 1870. En su familia existen numerosos antecedentes de perturbación mental, empezando por su madre que oye voces por la calle y tiene alucinaciones, dos de sus tíos internados en un psiquiátrico, un hermana demente, un hermano alcohólico, etc.

Desde muy niño se siente atraído por el sadomasoquismo, se divierte infligiendo dolor a los demás y sobre todo a él mismo. Sigue con atención los artículos de crímenes en la prensa, y colecciona sobre todo aquellos de los asesinos en serie caníbales, con los que se siente identificado.

A los veinte años mantiene relaciones homosexuales y ejerce la prostitución homosexual en Washington, en dónde viola a un niño y asesina a su primera víctima.

En esa época comienza a sufrir alucinaciones de tipo religioso y vive obsesionado con la idea del pecado, creyendo que la única forma posible de expiación es a través del sacrificio personal y el dolor.

Él mismo se inflige castigos masoquistas automutilándose, frotando por su cuerpo desnudo rosas con espinas, hundiéndose agujas de marinero en la pelvis y en los órganos genitales... en una ocasión es sorprendido en su habitación completamente desnudo, masturbándose con una mano y con la otra golpeándose la espalda con un palo del que sobresalen unos clavos. A cada golpe grita de dolor, mientras la sangre se desliza por sus nalgas.

Oficialmente, fue detenido ocho veces: la primera por tentativa de estafa, luego por robo, por pago con cheques sin fondos, por cartas obscenas a los anuncios de agencias matrimoniales de los periódicos.

En alguna ocasión afirma ser Jesucristo, que San Juan le habla y que el mismo Dios le ordena cometer sacrificios humanos.

Lo internan tres veces en un hospital psiquiátrico, dejándolo salir al poco tiempo en cada ocasión tras considerar que no es peligroso ni está loco, sino que simplemente sufre una personalidad psicopática de carácter sexual.

A pesar de todos estos delitos, la policía neoyorquina tardaría nada menos que seis años para poder inculparlo por asesinato.

"Escuchaba voces que me decían cosas y, cuando no las comprendía todas, trataba de interpretarlas con mis lecturas de la Biblia... entonces supe que debería ofrecer uno de mis hijos en sacrificio para purificarme a los ojos de Dios de las abominaciones y los pecados que he cometido. Tenía visiones de cuerpos torturados en cualquier lugar del Infierno..."

Albert Fish fue capturado por la policía el 13 Diciembre de 1935, lo logra a través de una carta de Fish enviada a la madre de la víctima que había secuestrado, en dónde le cuenta sus aficiones por el canibalismo y cómo se decidió a probar carne humana por primera vez con el cuerpo de su hija.

Querida señora Budd:

Hace algunos años, mi amigo el capitán John Davis, zarpo de California hacia Hong-kong, que por aquel entonces padecía los problemas del hambre, las calles se habían vuelto muy peligrosas para los niños entre 9 y 12 años porque tenían la costumbre de matarlos y cortarlos en pedazos y vender su carne como alimento.

Antes de zarpar mi amigo, rapto a 2 niños los mato corto en pedazos guiso su carne, y se la comió.

Esa es la razón de que hace algunos años yo acudiera a su casa el 3 de junio de 1928 con el pretexto de acompañar a su hija a la fiesta que daba mi hermana me la lleve a una casa abandonada, que había en Westcher County donde la estrangulé la corte en pedazos y comí parte de su carne tranquila no me la tire murió siendo virgen.

Tras leerla y sufrir un gran shock, se puso en contacto con la policía que tras investigar lograron encontrar la procedencia de la carta, siguieron la pista de Albert Fish, lo arrestaron el 13 de diciembre.

En su declaración afirmo que tras matar a la niña le corto la cabeza, con un trinchante y partió su cuerpo en dos con una sierra a la altura del ombligO.

El propio Fish lo reconocería: "No soy un demente, sólo soy un excéntrico. A veces ni yo mismo me comprendo".

Una vez detenido, se confiesa además autor de otros muchos crímenes y demás aberraciones que había estado llevando a cabo durante toda su vida: su deseo irresistible de comer carnecruda las noches de luna llena, que le valdría el apodo de "el Maníaco de la Luna", sus crímenes más atroces, algún acto de vampirismo como el caso de un niño de 4 años al que flageló hasta que la sangre resbalaba por sus piernas, luego le cortó las orejas, la nariz y los ojos, le abrió el vientre y recogió su sangre para bebérsela a continuación, además de desmembrarlo y prepararse un estofado con las partes más tiernas.

"...Decidí comérmela. La llevé a una casa abandonada en Westchester en la que me había fijado. En el primer piso me desvestí completamente para evitar manchas de sangre. Cuando me vio desnudo se echó a llorar y quiso huir, pero la alcancé. La desnudé, se defendió mucho, me mordió y me hizo algunos rasguños. La estrangulé antes de cortarla en pedacitos para llevarme a casa toda su carne, cocinarla y comérmela. No pueden imaginar cuán tierno y sabroso estaba su culito asado. Tardé nueve días en comérmela por completo. No me la tiré, aunque hubiese podido hacerlo de haberlo querido, murió virgen".

También narra la historia de un joven vagabundo al que obligó a realizar toda clase de actos sádicos, masoquistas y coprófagos durante dos semanas, además de cortarle las nalgas en varias ocasiones para beber su sangre. Finalmente intenta cortarle el pene con unas tijeras, pero cambia de opinión al ver el sufrimiento del chico y arrepentido le da diez dólares dejándolo huir.

Ante el psiquiatra explicó que por orden divina se veía obligado a torturar y matar niños, el comérselos le provocaba un éxtasis sexual muy prolongado.

También confesó las emociones que experimentaba al comerse sus propios excrementos, y el obsceno placer que le producía introducirse trozos de algodón empapado en alcohol dentro del recto y prenderles fuego. Los hijos de Fish contaron cómo habían visto a su padre golpeándose el cuerpo desnudo con tablones claveteados hasta hacer brotar sangre.

Durante el juicio quedó probado que realizó todo tipo de perversiones con más de 100 niños matando además a 15. Se descubrió también su extraño gusto por hacerse daño a sí mismo, uno de sus sistemas favoritos era clavarse agujas alrededor de los genitales. Una radiografía descubrió un total de 29 agujas en el interior de su cuerpo (algunas con tanto tiempo que habían empezado a oxidarse). Le gustaba comerse sus propios excrementos, o introducirse trozos de algodón empapados con alcohol dentro del recto y prenderles fuego En otras ocasiones había intentado introducirse agujas debajo de las uñas, pero no tardó en renunciar a ello cuando el dolor se hizo insoportable.


Estas declaraciones acerca de sus víctimas le cuestan a Fish la sentencia de culpable por crímenes con premeditación tras diagnosticarlo psicótico, pero cuerdo.

Es condenado a la silla eléctrica y ejecutado en la prisión de Sing Sing el 16 de enero de 1936.

Cuando se le preguntaba por la cifra exacta, respondía sonriendo: "Por lo menos cien".

Tubo una sorprendente reacción después de ayudar a los guardias a colocarle los electrodos, y se mostró entusiasmado.

Albert Fish se llevaría a la tumba su mayor secreto, el número de personas que habría asesinado. Las opiniones de los psicólogos son contrastadas en ese aspecto, unos hablan de varios centenares de víctimas, mientras que otros estiman que no hubo más de cincuenta. Finalmente se le acusa de haber asesinado un total de 15 niños, la gran mayoría procedentes de las capas más pobres de la población

"Que alegría morir en la silla eléctrica. Será el último escalofrío. El único que todavía no he experimentado..."

Detalle de una radiografía en la que se pueden observar multitud de alfileres y clavos clavados en su zona genital.


domingo, agosto 20, 2006

DANIEL Y MANUELA RUDA "Los Sicarios de Satánas"


“Estábamos sentados en el sofá y de pronto, Daniel se puso de pie. Golpeo con el Martillo a Frank. Mi cuchillo brillaba y escuche una voz que decía: “Apuñálale en el corazón”. Entonces se lo clave. Vi una luz a su alrededor. Era su alma, que había salido del cuerpo. En ese momento recitamos una letanía satánica”.


Este escalofriante testimonio fue presentado con total sinceridad, por Manuela Ruda, una joven alemana de 23 años, durante el juicio en el que ella y su marido eran juzgados por el brutal asesinato de su amigo Frank Hackert. A medida que avanzaba su declaración, Manuela iba desgranando todos los detalles de la cruel inmolación.


Los hechos se remontan al 6 de julio de 2001, aquel día los Ruda atrajeron al joven Hackert, antiguo compañero de trabajo de Daniel, hasta su apartamento, en la pequeña localidad de Witten, al oeste de Alemania. Una vez allí y sin previo aviso, Daniel golpeó con un martillo a su víctima, mientras Manuela se ensañaba con él, asestándole 66 puñaladas. Cuando Hackert murió, le grabaron en el pecho un pentagrama invertido: el símbolo del Diablo. Después recogieron su sangre en un recipiente y la bebieron. Para completar su orgía sacrificial, los asesinos hicieron el amor dentro de un ataúd que Manuela utilizaba para dormir durante el día.

Tres días después de cometer el crimen, la policía entraba en el apartamento, descubriendo el cadáver de Hackert y su sangre esparcida por las paredes. La madre de Manuela había recibido una carta de su hija en la que decía: “No soy de este mundo. Debo liberar mi alma de la carne mortal”. Temiendo que su hija hubiera hecho algo terrible, decidió avisar a la fuerza de seguridad. La escena era horrorosa. Además del cuerpo sin vida de Hackert, los agentes pudieron contemplar la peculiar decoración de la vivienda: imitaciones de cráneos humanos, cuchillos y machetes colgados en las paredes y una colección de objetos de culto satánico. Y algo más: una macabra lista en la cual figuraba 15 posibles víctimas.

Se inicio una búsqueda por todo el país que concluyó tres días después, cuando la pareja fue detenida en la ciudad de Jena. Durante el juicio, celebrado a comienzos de 2002, los acusados reconocieron haber asesinado a su amigo, aunque negaron cualquier responsabilidad, ya que, según declaró Manuela, sólo habían seguido ordenes de Satán: “No fue un asesinato, sino una ejecución. Satán nos lo ordenó. Debíamos obedecer, Teníamos que matar. No podríamos ir al infierno a menos que lo hiciéramos”. Y añadió friamente: “Queríamos asegurarnos de que la víctima sufriera”. El veredicto del tribunal fue más suave de lo que exigía la familia de Hackert: Manuela fue sentenciada a trece años de prisión y su marido recibió una condena de quince. El juez Arnjo Kersting-Tombroke resolvió que antes de ingresar en una prisión convencional ambos deberían recibir tratamiento psiquiátrico.

El diagnostico de los médicos libraron a los esposos de una condena mucho mayor, ya que según dictaminaron, “su responsabilidad estaba notablemente disminuida”, los definieron como “individuos profundamente perturbados”. A lo largo del juicio surgieron numerosos datos que apoyaban el carácter ritual del crimen. Los asesinos se habían casado el 6 de junio (el 6 del sexto mes), y llevaron a cabo su sacrificio el 6 de julio. Estas fechas configuran una conocida cifra: 666, el número de la bestia en el Apocalipsis de San Juan.

Daniel y Manuela aparecieron durante el juicio con una estética siniestra: ropas negras, botas militares, cruces invertidas y peinados llamativos. La propia joven explicó que se había iniciado en el satanismo en el ambiente metalero del Reino Unido. Allí frecuento locales de este tipo, e incluso llego a realizar prácticas de vampirismo. Ante la atenta mirada de los presentes, Manuela Ruda reconoció haber bebido sangre de voluntarios que había conocido por Internet y que junto a un grupo de personas con gustos similares, había frecuentado cementerios. Incluso relato como se había echo enterrar en una sepultura “para saber que se sentía “.

jueves, agosto 17, 2006

These are the loser days from a bitch's Life

Sí, ya se que había dicho que no iba a darle mas palo a esta chanchita. Pero entiéndanme. Chica migraña es tan cojuda que el hacerla pedazos es un favor a la sociedad, así que es mi deber cívico. Ah! y el maricón Aldo "estudié comunicación social por amor de Jesus" Casal, me hizo acuerdo. Así que dale las gracias a tu retrasado pana. Entre mongolos se entienden.

No obstante, quisiera desestimar el objetivo pedagógico de este post, ya que no es un intento por hacer ver cuantos contenedores de miembro viril vale chica migraña, porque su capacidad de entendimiento solo se reducen a "bon jovi" y "¡sigue mamando, que aun no termino, perra!" Tomando la frase del autor desconocido en el Blog de Iom, solo digo:

No intente enseñar a un cerdo a cantar. Perderá su tiempo y molestará al cerdo"

En este post encontrará una crítica a la ultima joya de chica cerdaña, que para abreviar le diremos MAJAGUAC. Como noté que habían varias cosas que valia la pena ser analizadas por un profesional, me ví en la necesidad de buscar un Psicoanalista. Traté de buscar a Bonny
ya que leer su incomensurable post Psicoanalizando a los blogs ecuatorianos me hizo creer que estaba ante la reencarnación de Melanie Klein o Ana Freud, pero bastó leer tres líneas para vomitar sobre el teclado y echarle baigon a el monitor.

Así que tuve que descartar a Bonny, por mas blanca, rubia, ojos azules y tetona que sea. Luego recordé que vi en los comentarios del blog de batiduende este comentario:

NO LLORES Q EL LUNES TE PSICOANALIZARE CON PRUEBAS! JAJAJA

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Entrè entonces a su blog, que creì estarìa lleno de interesantes artìculos de corte analìtico con las tendencias actuales de Psicoterapia breve de orientaciòn Psicoanalìtica y contrastes de las teorìas Lacanianas con el Constructivismo y enfoque Cognitivo conductual de la psicologìa contemporànea. Pero no señores, al parecer entrè al blog justo en un momento en el que el señor Psicoanalista nirvana està haciendo un experimento vital: Se ha puesto en el rol de un niño de 6 años con retraso mental acompañado de dislexia, enuresis, encopresis y càncer tumoral cerebeloso; y se encuentra escribiendo posts bajo este punto de vista y concepciòn para ver la reacciòn del colectivo. Aunque no se como ayuda esto a el Psicoanàlisis, un experimento de tal envergadura no puede ser interrumpido por algo tan banal como hacer mierda a MAJAGUAC. Asì que desistì de la idea.

Superado el chasco, me acordé que Tijerón dijo:

Ajusticiador (Motivo: ¿Por qué no mejor lo psicoanalizas?)

Aguanten un rato...

¿Còmo chucha se pueden Psicoanalizar palabras? Bonny, nirvana83 y Tijeron se pueden ir derechito a la casa de la verga, porque de psicoànalisis no saben una mierda.

Ya me cabreè. Voy a hacer esto solo. Voy a hacerle caso a esta mente superdotada Tijerón ya que con sus conocimientos leyendo el Blog de Maddox, supongo que si se puede Psicoanalizar alguna huevada. Veamos como sale.

Hagamos esto sencillo y educativo. MAJAGUAC escribiò:

Cuando me siento abrumada por el estrés y la rutina diaria, muchas veces antes de irme a la cama luego de una agotadora jornada de trabajo, me gusta recordar, en una mezcla de nostalgia y alegría, la época dorada del colegio. Así me relajo antes de dormir y mucho más cuando, simultáneamente, me pongo a escuchar la música que estaba de moda en aquel entonces, o reviso mi álbum de fotos del ayer o mis libros de Inglés o de Shorthand que aun conservo. A causa de esto en la madrugada sueño con que me levanto a las 05:00 a.m. alistándome para ir a mi querido “28”, que me demoro en encontrar mis zapatos y mi equipo de gimnasia en medio de la oscuridad de esa hora de la mañana, o que se me va el expreso porque se me quedó algún deber importante en mi escritorio, o que estoy en la jodedera con mis panas en el curso o jugando volley en los patios con ellas.

Sintomatologia: Patológica necesidad de regresión al estadío adolescente.

No me canso de repetir que la mejor época de mi vida la tuve cuando era adolescente. En aquel entonces, mis crisis y mis problemas obviamente eran pequeños en comparación con los que enfrento ahora. Los principales eran el hecho de no tener la independencia económica ni libertad para poder salir a donde yo quería. Mis hermanas eran mis chaperonas, yo no podía salir en la noche sino era con ellas, y si salía por ahí sola con amigas o amigos de mi edad, (estos últimos eran muy pocos) lo podía hacer pero solo por el barrio y no podía llegar a mi casa mas allá de las 19h00. La mesada que recibia era infima y tenia que recurrir al remo o a realizar tareas que no me gustaban para ganar algo mas de plata y poder comprarme las cosas que me gustaban como cassettes, posters, revistas, moños, vinchas y stickers..

Sintomatología: Negación de la realidad actual. Melancolía, necesidad de exteriorizar hechos traumáticos. Excesivas justificaciones para obtener pena del colectivo.

Muchos adolescentes de ahora al leer esto han de encamar huevadas como ‘pero qué tanto extrañas si has sido una pobre, triste y aburrida loser, fucking damned teenager, Chica Migraña!’, ‘De la casa al colegio y del colegio a la casa todos los días, gran guevada de adolescencia bacán que tuviste’, ‘que recién tuviste tu primer enamorado a los 15 años? LOL No jodas!’, ‘Y todo por culpa de tus odiosas y metiches hermanas!’….etc. etc. etc. Puede ser. Allá por los años 90’s, por ejemplo, no habían tantos centros comerciales en Guayaquil donde pasar el rato con amigas y conocer nuevas personas, en especial del sexo opuesto. El Internet no estaba tan difundido y el uso del celular era un lujo. Cuando tenia 14 a lo mucho íbamos al Garzocentro, al Alban Borja, o al Policentro, aunque no tanto porque era prohibido banderearse con el uniforme del colegio por ahí, mucho menos con enamorados. Por lo menos yo nunca lo hice, ni la people de mi grupo porque en el 28 nos mandaban tantos deberes y lecciones que nos dedicábamos a estudiar en forma, y si escuchábamos de manes que andaban en huevadas los castigos eran desde mala calificación en conducta, llamada de atención a los representantes legales, hasta suspensión temporal o definitiva.

Sintomatologia: Ausencia del sentido de culpa y responsabilidad propias. Continuo malestar y quejas a el entorno sociopedagógico. Persistentes regresiones al estadío puberíl. Leve narcisimo en su yo actual.

Ahora los pelados hacen lo que se les da la gana, salen con amigos a chupar, fuman como chimeneas, tiran desde los 13 o antes, van a la función del cine de las 11 de la noche, el celular y el Internet se convirtieron en sus mejores amigos y alcahuetes para sus huevadillas y los colegios e incluso los propios padres dicen cuidarlos y estar preocupados pero la verdad es que poco o nada les importa que hagan con su vida sus chiquillos. Quizás soy como siempre drástica, pero que puedo hacer si cada vez me sorprenden mas los alcances que tienen los pelados de hoy en día. Ya no son ningunos cojudos inocentes.

Sintomatologia: Pulsiones sexuales desplazadas. Sentimiento de envidia inconsciente dirigido a las cosas anuladas que no pudo realizar. Conflictos no resueltos en su adolescencia. Uso excesivo de lenguaje grotesco como mecanismo de defensa hacia el exterior. Mascara de agresividad bajo una personalidad hambrienta de aceptación social.

Bueno, me desvié del tema…. Ah ya. No considero que fui una adolescente nerd. También tuve mi pequeña vida social. Claro que por lo general mis fiestas eran con gente mayor a mi, porque ya les dije que yo solo iba a fiestas con mis hermanas, es por esto que ya ahora no me llama la atención ir a discotecas, en primer lugar porque la música que ofrece la mayoría es una mierda, otra por mi migraña y no aguanto el humo del cigarrillo ni puedo tomar y otra porque ya viví ese ambiente de ir de disco en disco casi todos los fines de semana (y es realmente cansado y hace daño para la belleza jajaja acuérdense que ya tengo 25 y a esta edad empiezan a notarse las lineas de expresión en toda la cara jajaja.) Logré conocer algunas de las discotecas de moda de aquel entonces: Tequila-la, Planeta Azul, Punto Aparte y el famoso y nunca bien ponderado Infinity (en aquel entonces a Infinity mi hermana y yo la llamábamos ‘Electric House’ jaja) aunque ya para el año 95 era la época de decadencia de Infinity, donde las malas lenguas decían que se infiltraban locas y fumones, la música era super chévere incluso mi otra hermana era amiga del DJ de ahí y le grabo unos cuantos cassettes con las mezclas bacansisisimas que solo estos manes pueden hacer. Dichos cassettes eran la sensación de las fiestas organizadas en casa de las amigas de mis hermanas y yo tambien me los llevaba al colegio para hacer relajo en campañas o en las fiestas de navidad y fin de curso, donde se bailoteaba a más no poder.

Sintomatologia: Mecanismos de compensación y suplantación para mantener el ego afirmado. Posible proyección a personas que tienen su yo ideal. Excesiva especifidad en la información, que denota una fijación en los hechos pasados.

Como siempre, tuve un lugar especial para mis artistas favoritos. En mi diario intimo de hace 10 años consta que mis consentidos eran, en el siguiente orden: Nirvana, Bon Jovi, Guns N’ Roses, Queen, Def Leppard, Aerosmith, Ugly Kid Joe, Metallica, Green Day, Offspring, Blind Melon, Tears for Fears, Stone Temple Pilots, Soul Asylum, Kiss, Skid Row, Mr. Big, The Doors, AC/DC, Collective Soul, Scorpions, Ozzy Osbourne, The Black Crows, Candlebox, Cranberries, Red Hot Chili Peppers, Alanis Morissette, Oasis, Garbage, No Doubt, Cardigans, U2, Smashing Pumpkins y Republica. Tenia una pequeña colección de discos y cassettes de algunos de los arriba mencionados. Claro que como siempre mi sueño mas deseado era el formar una colección original y completa de ellos, y obtener un equipo de sonido de la mas alta tecnología (en esa epoca no habian Ipods ni MP3) y me frustraba silenciosamente cuando no tenia el suficiente dinero como para adquirir aquello…. en esos años se vivían tiempos de estricta austeridad en mi casa porque mi papy enfermó severamente y no podían engreírme con todo lo que yo quería. Para ganar plata extra les hacia los deberes a las vagas de mis amigas, en especial Taquigrafia y Contabilidad. Mis hermanas, en especial Paulina, era la que mas me consentia y compartia mis gustos.musicales, y de pronto salia con alguna sorpresa super agradable, como el album ‘Elemental’ de Tears for Fears para mi cumpleaños No. 13 (aun lo tengo) o el poster gigante de Jon Bon Jovi que me regaló en visperas del concierto ofrecido por mi banda favorita en Quito en el Halloween del ’95, o el CD de Savage Garden para cuando cumpli 18. Ahora me dice que soy una vieja ridicula que vive de los recuerdos porque escucho la misma música que hace 10 años y no he renovado en casi nada mis gustos musicales.. Y yo le digo: ¿que quieres que me guste? Daddy Yankee?? Don Omar?? Esos carevergas sufridores con voz de cagones de RBD, Kudai , Sin Bandera, Jose Luis del Fierro, Reik o como chucha se llamen?? Que escuche Radio Disney? NO FUCKING WAY!!!

Sintomatología: Tendencia a ocultar sentimientos mediante musica Rock. Habilidades sociales pobres compensadas con dedicación a los estudios, posible popularidad nula y grandes fracasos sentimentales,de los cuales se refugia en su música.

Asi es amigos, así comparto una parte de mi verdadera historia, espero hacer una segunda parte porque hay hartas experiencias que ya habia olvidado pero gracias a este diario que encontré, y algunas fotos que mi mami tenia guardadas en el cajón de los recuerdos puedo transmitirlas en este espacio. No se aceptan insultos, ya saben que serán borrados. Ni tampoco vale que me hagan pedazos en otros blogs. Den gracias que estoy de buen humor y no he jodido a nadie de ustedes, como dice el gordo patucho pendejo de Pinoargoti A TI TE DIGO …

Sintomatologia: No aceptación de la retroalimentación, debido a una gran suceptibilidad del criterio social.

No llego al diagnóstico porque sería un fraude llegar a este mediante escritos en un blog, aún en el enfoque de la Psicología dinámica. Pero ya tenemos una gran idea de con quién estamos tratando.

PD: Este es el primer post que tuve que asesorarme con uno de los integrantes de este blog, porque mis conocimientos del Psicoanálisis eran escasos. Pero quedó bien, aunque no falta que salté algun Freudianito de la católica a llorar.

lunes, agosto 14, 2006

Richard Chase: El vampiro de Sacramento

"A veces oigo voces por teléfono... ignoro qué voces... amenazas. Suena el teléfono y alguien me dice cosas extrañas...que mi madre me envenena poco a poco y que me voy a morir. Me siento observado.. sé que alguien me vigila...."


"...si devoré a esas personas fue porque tenía hambre y me estaba muriendo. Mi sangre está envenenada y un ácido me corroe el hígado. Era absolutamente necesario que bebiera sangre fresca.."



Estas declaraciones, forman parte de una entrevista psiquiátrica a Richard Tranton Chase, un asesino diagnosticado esquizofrénico paranoide tras disparar, apuñalar, descuartizar, y beber la sangre de seis personas en 1987, ganándose el apodo de "el vampiro de Sacramento".


Desde muy joven, Chase es conocido por su conducta psicótica que alterna períodos de apatía con otros de agresividad. Esto, según algunos psicólogos estaría debido en gran parte a unos traumas infantiles por las constantes peleas entre su padre alcohólico y su madre, así como el posterior divorcio de éstos.


A los 21 años, se va de casa para compartir piso con unos amigos.
Allí, continuamente drogado, empieza a obsesionarse con la idea de que una organización criminal trata de acabar con él, hasta tal punto que clava con tablas la puerta de su habitación, entrando y saliendo de ella por un pequeño agujero que había hecho en el fondo de un armario de pared.


Poco tiempo después, se afeita la cabeza y acude asustado al médico alegando que su cráneo se está deformando poco a poco y los huesos de éste le agujerean la piel. Al mismo tiempo dice sentir que se muere porque alguien le ha robado la arteria pulmonar, y nota que su sangre no puede circular.


Es internado en un psiquiátrico, saliendo de éste al poco tiempo, pese a la opinión de algunos médicos que lo consideran peligroso.


Una vez sólo, deja de tomar la medicación que le habían prescrito y su conducta comienza a empeorar, pues creyendo que su sangre se estaba volviendo polvo y que necesitaba otra más fresca para sobrevivir, se inyecta y bebe sangre de conejo, tragándose además crudas las vísceras de los animales...


Poco después cae gravemente enfermo, y los médicos tras percatarse de su obsesión por consumir sangre, lo internan de nuevo diagnosticándole una fuerte esquizofrenia paranoide además de conducta peligrosa.


Un año después, de nuevo en la calle, descuartiza a numerosos perros, gatos y vacas afín de beber su sangre y vísceras mezcladas con Coca-Cola a modo de cóctel, estando convencido que a causa de la falta de sangre, su estómago se empieza a pudrir, su corazón disminuye de tamaño y que los distintos órganos se desplazan en su interior.


Fascinado por los crímenes de los asesinos Kenneth Bianchi y Angelo Buono, guarda celosamente todos aquellos recortes de prensa que los menciona y se compra una pistola de calibre 22 dispuesto a imitarlos.


A los 28 años, comienza una serie de crímenes disparando dos veces sin motivo alguno sobre un desconocido, que se convertiría en la primera de sus víctimas.


Su segunda víctima, una joven de 22 años, es salvajemente asesinada a pocos metros de su casa cuando se encontraba sacando la basura. Chase dispara tres veces sobre ella, y mientras agoniza, le abre el vientre para arrancarle los intestinos, que esparce cuidadosamente por el suelo. Luego, le corta el hígado, el diafragma, un pulmón y los riñones, colocándolos encima de una cama. En un ataque de histeria apuñala varias veces el cuerpo sin vida y tras beber su sangre, se pinta la cara con ella. Finalmente, como toque final a su "obra", defeca sobre la boca del cadáver y abandona la casa, satisfecho.


Cuatro días después comete el más sangriento de sus crímenes entrando en una casa elegida al azar y disparando a la cabeza de una pareja de 27 años, un niño de 6 años y un bebé de 22 meses. Luego, llevándose el cuerpo de la mujer a una habitación, sodomiza el cadáver, le arranca un ojo y bebe su sangre. Momentos más tarde, es sorprendido en su macabra carnicería por alguien que llama a la puerta mientras vaciaba el cráneo del niño, y huye a toda prisa llevándose el cadáver del bebé.


En su propia casa, decapita el cuerpo tras beberse la sangre y devorar el cerebro crudo.
Esa misma tarde, la policía descubre la matanza y comienza una serie de investigaciones por toda la ciudad registrando cada rincón de la ciudad tratando de atrapar al psicópata asesino.


Cuando tres policías llaman a la puerta del vampiro no obtienen respuesta, pero oyendo ruidos en el interior deciden de vigilar el apartamento.


Poco después, Chase sale de la casa con una caja de cartón bajo el brazo, que arroja al suelo para tratar de huir al ver a los agentes en la puerta. Su contenido se esparce por el suelo asombrando a los policías: se trata de ropa ensangrentada y trozos de cerebro humano...


El asesino es finalmente detenido. Al registrar su apartamento, se encuentran además de un espantoso olor a putrefacción, manchas de sangre cubriéndolo todo, huesos humanos en la cocina y el salón, un plato con restos de cerebro encima de la cama y la nevera repleta de recipientes con órganos humanos y animales en el interior.


En el juicio trata inútilmente de justificar sus macabros crímenes diciendo que unas voces de seres extraterrestres y otras criaturas lo acosaban continuamente obligándole a matar...
Finalmente es condenado a pena de muerte aunque su ejecución en la cámara de gas nunca sería llevada a cabo, pues Richard se suicida pocos meses después en su celda con una sobredosis de antidepresivos en diciembre de 1980.

Kroll, el caníbal


Joachim Kroll nació en Hindenburg, Alemania. Sólo fue tres años a la escuela y nunca aprendió a leer ni a escribir. Su madre, que era viuda, falleció cuando él era un adolescente. A raíz de su muerte, sus cinco hermanos y hermanas fueron separados y, con el tiempo, perdieron el contacto con Joachim.

A saber qué razones se aunaron para que este hombre pequeño, común y corriente se convirtiera en asesino en serie y caníbal. En 1955, a la edad de 22 años, Joachim acechó a Irmgard Strehl, de 19 años, cuando ésta iba por una carretera rural cerca de la ciudad de Walstedde. Irmgard fue asesinada por estrangulación y luego violada, un destino que correrían todas las mujeres que fueron víctimas de Joachim. Su cadáver fue encontrado a varios metros de la carretera.

Durante cuatro años, los extraños impulsos que llevaban a Joachim a matar y a violar permanecieron latentes. Luego, en rápida sucesión, volvió a las andadas, dos veces en un mes. Las víctimas fueron Klara Tesmer, de 24 años, y Manuela Knoot, de 16.

Fue al matar a Klara cuando a Joachim le empezó a gustar la carne humana. Cuando se encontró su cadáver en un bosque cercano, la policía se quedó horrorizada al ver los grandes trozos de carne que le habían arrancado de los muslos y los hombros.

Años después, Joachim reveló que había envuelto la carne en un papel y luego se la había comido en la cena. Desgraciadamente, un tal Heinrich Ott fue arrestado y acusado del asesinato de Klara. A la espera del juicio, Ott sufrió una depresión aguda y se ahorcó.

En 1962, Joachim volvió a actuar. Su primera víctima fue Petra Giese, de 13 años. Dos meses después, mató a Monika Tafel, de 12 años. Ambas, originarias de la región de Bruckhausen, habían sido asesinadas por estrangulamiento, y después violadas. De nuevo, se encontraron signos de canibalismo. Dos hombres inocentes fueron arrestados, declarados culpables y encarcelados por estos asesinatos.

Vinzenz Kuehn, un conocido pederasta, pasó seis años en prisión por el asesinato de Petra Giese. Walter Quicker, un hombre que amaba a los niños, pero que nunca había tocado a uno solo, fue declarado sospechoso del asesinato de Monika Tafel. Como no había ninguna prueba en su contra, fue liberado. La mujer de este hombre totalmente inocente se divorció de él por el incidente. Sus amigos y conocidos le hicieron el vacío. Unos meses después del asesinato, se colgó en el mismo bosque donde se había encontrado el cadáver de Monika Tafel.
Tres años después de estos crímenes, Joachim volvió a matar. Estaba buscando una víctima femenina en Grossenbaum cuando se topó con una pareja que había aparcado en un callejón conocido por ser refugio de enamorados. Hermann Schmitz y su novia, Marion Veen, se estaban besando en el asiento delantero de su automóvil. Joachim se puso delante del vehículo y empezó a mover los brazos como loco. Creyendo que este hombre obviamente agitado tenía algún problema, Schmitz salió del automóvil. Joachim le asestó varias puñaladas.

Marion, quien entendió lo que estaba pasando rápidamente, se pasó al asiento del conductor y puso el vehículo en marcha. Joachim logró apartarse de un salto en el último momento. Corrió hacia los matorrales y desapareció, en medio de la noche. Marion colocó una horquilla debajo de la corneta para que esta no parara de sonar, esperando así llamar la atención. Entre tanto, detuvo el vehículo y corrió al lado de Hermann. No había nada que pudiera hacer. Estaba muerto.

En septiembre de 1966, Joachim asesinó y violó a Ursula Rohling, de 20 años. Inmediatamente se sospechó de su novio, Adolf Schickel, la última persona vista en su compañía. Aunque fue arrestado, después lo dejaron en libertad. Adolf tuvo que hacer frente a las burlas de sus amigos y vecinos, que estaban totalmente convencidos de su culpabilidad. Cuatro meses después de recuperar su libertad, se llenó los bolsillos con piedras y se ahogó en un río cercano.

Joachim siguió asesinando. En Bredeney, engañó a una niña de cinco años, Ilona, consiguiendo que se subiera a un tren. Al cabo de veinte millas, ambos bajaron del tren. Joachim la estranguló y violó, y luego se llevó partes de su cadáver.

A este hombre enloquecido no le importaba la edad de sus víctimas. Llamó a una puerta elegida al azar. Cuando Maria Hettgen, de 61 años, abrió, murió a puñaladas. Poco después, Jutta Rahn, de 13 años, corrió la misma suerte. Se sospechó que un hombre llamado Peter Schay, sobre el que la policía estaba investigando, era el asesino, principalmente porque tenía el mismo grupo sanguíneo que el asesino.

No obstante, como no había pruebas de que hubiera participado en el asesinato, se le dejó libre. Durante varios años, los amigos y vecinos de este hombre inocente le hicieron el vacío, hasta que Joachim confesó haber asesinado a Jutta.

En 1976, a Oscar Muller, de Laar, Alemania Occidental, su vecino de la puerta de al lado le dijo que el inodoro de su piso estaba atascado. Oscar fue a verlo con la idea de arreglarlo. Se quedó horrorizado al darse cuenta de que en el inodoro flotaban diminutos trozos humanos. Salió del edificio y rápidamente encontró a un agente de policía. En el barrio había varios policías porque esa misma mañana había desaparecido de un parque cercano Monika Kettner, una niña de cuatro años. Un agente acompañó a Oscar, echó un vistazo al inodoro y llamó a sus superiores.

Un grupo de detectives fue a ver a uno de los vecinos de Oscar, Joachim Kroll, para registrar su piso. En su frigorífico encontraron trozos de carne de la niña desaparecida. En el congelador, descubrieron más trozos de carne humana bien empaquetados. El asesino era consciente de que sus 21 años de asesinatos iban a concluir. Confesó todos los asesinatos que recordaba, pero admitió que había muchos otros de los que no se acordaba. La policía cree que no pasó un solo año en que no se cobrara una víctima, aunque no se acordara de todas ellas.

Mientras contaba con todo lujo de detalles los crímenes de los que se acordaba, Joachim contó con toda tranquilidad como conoció a Gabriele Puettmann en un banco de un parque. Tenía la intención de matarla y violarla pero cuando le enseñó fotos pornográficas, Gabriele saltó y se fue corriendo.

Gabriele nunca le habló a sus padres del incidente pero cuando, once años después, fue nombrada en la confesión de Joachim, se dio cuenta de lo afortunada que había sido al lograr escapar de las garras de uno de los caníbales más conocidos de Alemania.

Como en Alemania Occidental no existía la pena capital, la máxima pena a la que pudo ser condenado Joachim Kroll fue cadena perpetua.